Miguel Ángel Santos Guerra, nacido en Grajal de Campos (León, España) en 1948, es una figura prominente y respetada en el panorama pedagógico contemporáneo. Su formación académica es sólida y diversa, habiendo obtenido las licenciaturas en Psicología y Pedagogía, así como el Doctorado en Ciencias de la Educación, todos por la Universidad Complutense de Madrid. Complementó su formación con estudios de Psicología en la Universidad de Boston y Cinematografía en la Universidad de Valladolid. Esta base multidisciplinar le ha permitido abordar los fenómenos educativos desde múltiples perspectivas, consolidándose como Catedrático Emérito de Didáctica y Organización Escolar en la Universidad de Málaga, institución a la que ha estado vinculado gran parte de su carrera.

Su trayectoria profesional abarca todos los niveles del sistema educativo, desde maestro de escuela primaria hasta profesor universitario, pasando por la enseñanza secundaria. Esta experiencia directa en distintas etapas le otorga una comprensión profunda y práctica de la realidad escolar. En la Universidad de Málaga, además de su labor docente e investigadora como Catedrático, desempeñó funciones de gestión como Director del Departamento de Didáctica y Organización Escolar. Su influencia trasciende las fronteras españolas, siendo un conferenciante y profesor invitado habitual en numerosas universidades de Europa y, muy especialmente, de América Latina, donde sus ideas gozan de gran recepción. Ha dirigido innumerables tesis doctorales y proyectos de investigación, formando a nuevas generaciones de educadores e investigadores.

El pensamiento de Santos Guerra se caracteriza por una mirada crítica y comprometida con la mejora de la educación. Sus áreas de especialización principales giran en torno a la evaluación educativa, la organización escolar, la formación del profesorado y la calidad de la enseñanza. Es particularmente conocido por su enfoque sobre la evaluación, la cual concibe no como un mero acto de calificar o seleccionar, sino como un proceso ético y dialógico de comprensión y aprendizaje, fundamental para la mejora tanto del alumnado como de la propia institución. Cuestiona las estructuras burocráticas y las dinámicas de poder ocultas en las escuelas (como explora en «Entre bastidores») y aboga por una organización más democrática, participativa y centrada en las personas y sus procesos de aprendizaje.